Platón, por su parte, no negó toda realidad que se le da a los sentidos (mundo sensible), ya que lo sensible posee también, cierto tipo de ser. Por lo que el mundo sensible se encontraría en un nivel intermedio entre el ser y el no ser.

Este grandioso filósofo que dio la vuelta al pensamiento filosófico de la Atenas del siglo V a.C fue una importante imagen a seguir para Platón. Nació en el año 470 a.c y murió en el 399 a.C Pertenecía a una familia de clase media, su padre era escultor y su madre matrona. Un aspecto muy importante es que fue maestro de Platón, y que dedicó su vida a la búsqueda de la verdad, interrogándose a si mismo y a los demás sobre el bien humano, la justicia, la felicidad y la virtud. Los primeros años de su vida coincidieron con el periodo de esplendor de la sofistica Atenas, posteriormente criticaría el relativismo propuesto por los dichos Sofistas.

Sócrates, como bien hemos mencionado antes, criticaba el relativismo sofista, el diferenciaba la mera opinión de la verdad, que para él y Platón no era relativa sino que había verdades absolutas , objetivas y universales.

También afirmó que el ser humano posee la verdad dentro de sí mismo y que mediante una educación que le guiase y le orientase, hallaría por sí mismo dicha verdad. El método a usar, de Sócrates, se llamaba dialéctica que estaba compuesta por dos fases, la ironía cuyo objetivo era hacer dudar al discípulo de aquello que cree saber y que caiga en la cuenta de que realmente no sabe sobre aquello que creía saber, y, por último, la mayéutica que consistía en hacer hallar, al discípulo, la verdad que está dentro de sí mismo mediante preguntas que le formula el maestro.

Por otra parte, Sócrates intentaba conceptualizar aquello que era abstracto, ya sea la belleza, la justicia o el bien.  También afirmaba de sí mismo la célebre frase “Solo sé que no sé nada”, ya que aquel que quiere aprender tiene que reconocer su ignorancia.

Por último, cabría decir que este fue juzgado y condenado tras la restauración de la democracia por parte de Trasíbulo. Platón se ve influido por esta muerte de su maestro y comienza a pensar en un tipo de política perfecta. Los pensamientos que transcienden de Sócrates a Platón son la dialéctica socrática, la crítica al relativismo de los Sofistas y, sobre todo, el intelectualismo ético.